Eliminar el vello no deseado
Los temporarios:
Como su nombre lo indica, estos métodos de depilación dan resultados que sólo duran un tiempo determinado y necesitan repetirse a menudo (en general, después de algunos días).
Contrariamente a la creencia popular, afeitarse no hace que el vello se vuelva más grueso ni más oscuro. Un estudio clínico norteamericano publicado por primera vez en 1928 demostró que los pelos que vuelven a crecer no son más oscuros ni más duros.
Los depilatorios: generalmente, se trata de cremas, polvos y lociones que contienen soluciones químicas que permiten disolver el vello de la superficie de la piel. También son económicos, rápidos y casi nunca duelen. Pero, como en el caso del afeitado, son provisorios y necesitan repetirse cada dos o tres días para mantener el aspecto terso de la piel. Además, presentan un riesgo (sobre todo, para quienes tienen la piel sensible): pueden irritar la piel y provocar quemaduras químicas.
La fricción: se trata de un método de depilación menos corriente, pues sus efectos son limitados. Se lo usa principalmente para el vello fino de las piernas. Se usa una superficie rugosa (habitualmente pegada a un guante) para quitar el vello de la superficie de la piel. La ventaja que tiene es que limpia la piel. Además, también es bastante barato, con un resultado a corto plazo, por lo cual el procedimiento debe repetirse después de algunos días para que la piel se mantenga tersa. Es importante tener mucho cuidado de no frotar demasiado fuerte para evitar las irritaciones y las abrasiones.
Existen dos métodos temporarios que se mantienen después de algunos días. Ellos son:
La depilación: esto implica el uso de una pinza de depilar para tirar del pelo desde la raíz, uno por uno, o varios a la vez. Se usa generalmente en superficies pequeñas, como las cejas o los pelitos aislados del bozo. El procedimiento es demasiado doloroso y demasiado lento como para que las mujeres se tienten y lo usen en las grandes superficies, como las piernas, o las zonas sensibles como la entrepierna. Si se hace mal, la depilación puede dañar e irritar la piel.
El azucarado: el procedimiento es bastante similar al de la cera. Se basa en el uso de una pasta espesa (generalmente hecha a base de azúcar, de ahí su nombre) que se aplica sobre la piel y se recubre con una tira de papel. Enseguida se tira del papel de forma rápida, sacando el vello con él. Es económico y rápido, pero puede dejar algunos pelos escondidos en la superficie. Potencialmente, es igual de doloroso que la cera.
La depilación con hilo: esta técnica es llamada Khite en árabe y Fatlah en egipcio y la realiza un especialista que mantiene un extremo de un hilo de algodón entre sus dientes y el otro en su mano izquierda. La parte del medio se enrolla entre el índice y el dedo mayor de la mano derecha. El especialista utiliza el anillo para atrapar una serie de pelos y arrancarlos de la piel. Es relativamente poco cara y el resultado puede durar cuatro semanas, pero es complicado encontrar especialistas fuera de las grandes ciudades. Es eficaz en las cejas y el bozo, aunque puede tener efectos secundarios, como los enrojecimientos en la superficie de la piel o cambios de pigmentación.
Puede llegar a ser difícil alcanzar la parte de atrás de las piernas, y la piel debe estar tirante en cada pasada de la depiladora. Para algunas mujeres es un aparato un poco incómodo, en particular, en las zonas sensibles.
Existe una gran cantidad de procedimientos “permanentes” para quitar el vello, de los cuales algunos son más eficaces que otros. El objetivo es no dañar la piel cuando se destruye el folículo, logrando un resultado verdaderamente eficaz. Aquí puedes ver algunos de los métodos más eficaces:
La electrólisis: la electrólisis ofrece un resultado permanente en la mayor parte de las personas, pero necesita mucha preparación para que se realice correctamente. A lo largo del procedimiento, un hilo de metal fino se desliza sobre el folículo y se envía una corriente eléctrica para quebrarlo e impedir el nacimiento de un nuevo pelo. Es el método que permite lograr los mejores resultados y los más duraderos, pero puede ser caro y doloroso, algo realmente duro. Hay que aclarar que a algunas personas la electrólisis no les produce ninguna reacción.
El láser: con el método de depilación por láser, se dirige una luz con una frecuencia específica sobre la piel, apuntando a las zonas oscuras (los pigmentos) y provocando daños térmicos o mecánicos en el nivel de los folículos. Algunas personas que lo probaron notaron reducciones o desaparición del vello durante períodos prolongados, después del tratamiento. Se considera seguro y se puede aplicar en zonas anchas. Para algunos, puede ser incómodo, y no se recomienda a quienes tienen pigmentos oscuros. Es caro, y no todo el mundo reacciona al tratamiento, incluso quienes tienen la piel clara y el vello oscuro.
La lámpara flash: la lámpara flash funciona, en principio, como el láser, con la diferencia de que se usa todo el espectro de luz, y no solamente una frecuencia específica. Aquí, una vez más, algunas personas observan efectos prolongados o permanentes. Y, al contrario, a otras no les funciona.
Las medicaciones orales: estos medicamentos están pensados para detener el crecimiento del vello no deseado del cuerpo. Se trata de espironolactona, finasteride, flutamida, acetato de ciproterona, ketoconazol, gonadotrofina, todos tratamientos hormonales. Todas estas medicaciones corrigen las causas específicas del vello excesivo y no pueden ser utilizadas como simples máquinas depilatorias cosméticas. Exigen de una prescripción médica y unas indicaciones específicas. Algunas de estas medicaciones pueden ocasionar efectos secundarios graves. Una vez más, estos medicamentos se usan para resolver los problemas clínicos de crecimiento anormal del vello y NO para arrancar los pelos por una cuestión estética.
Las prescripciones determinadas: para los casos de crecimiento anormal del vello del rostro, los médicos pueden prescribir un tratamiento especial llamado Vaniqa que contiene eflorcitina. Este elemento inhibe la enzima ODC (ornitina descarboxilasa), que impide el crecimiento del vello. Los estudios demuestran que el tratamiento es eficaz en un 58% de las mujeres testeadas. No se trata de una crema depilatoria, por lo cual es necesario utilizar otros métodos de depilación paralelos a éste. Se necesitan aproximadamente dos meses para que se note el resultado y, si se interrumpe el tratamiento, harán falta otros dos meses. Es necesario consultar a un médico para utilizar este tratamiento.
Advertencias:
Es muy importante decidirse por el método que mejor se adapte a cada persona. Muchos métodos son eficaces, pero algunos pueden ser peligrosos o, en su defecto, su eficacia puede ser dudosa. Presta mucha atención a los métodos eléctricos, a las “electrólisis transdérmicas”, a la fotodepilación, microondas, medicamentos de venta libre, y otros complementos dietéticos. Sé responsable y busca el método que se adapte mejor a tus necesidades y a tu situación personal.
©hairfinder.com
Ver también: El vello anormal en las mujeres