Informaciones básicas para las coloraciones
Desde el inicio de los tiempos, las mujeres se han valido de diferentes métodos para cambiar o realzar el color de su cabello. En la Antigüedad, se hacían productos capilares con semillas machacadas y extractos de plantas que se aplicaban sobre el cabello. En los siglos XVII y XVIII, las mujeres se teñían el cabello con aceite y con ungüentos. Y hoy, el color del cabello con el que nacemos muchas veces no tiene nada que ver con el que llevamos.La coloración moderna es un proceso químico que agrega o quita pigmentos en el propio cabello. No tiene nada que ver con los polvos o los productos de los siglos anteriores, pues las tinturas actuales pueden penetrar en el tallo del cabello y pueden transformar el rubio en negro o en cualquier tonalidad intermedia. Siempre tenemos productos que tiñen superficialmente, pero también disponemos de coloraciones que son capaces de permanecer durante varios días, semanas o incluso hasta que el cabello vuelva a crecer.
Tus cabellos toman su color a partir de una sustancia que se llama melanina, que se encuentra en la corteza o cortex del cabello (la parte que se encuentra entre el exterior, llamada cutícula, y el interior, llamada médula). Hay dos tipos de melanina: la eumelanina (que es la responsable de los cabellos castaños o negros) y la fenomelanina (a la que le debemos los cabellos pelirrojos o rubios). El cabello puede tener los dos tipos de melanina o ninguno, como en el caso de los cabellos canosos.
Si estás pensando en teñirte el pelo, primero debes determinar cuál es el “pigmento contribuyente” de tu cabello. Es el color intrínseco de tu pelo. Muchas personas con el cabello castaño poseen el mismo pigmento contribuyente que la gente rubia, en cuyo caso solamente varía la luminosidad y la intensidad del color.
Utilizamos como término “nivel” para indicar la luminosidad o la oscuridad del cabello. El nivel del cabello está basado en una escala que va del 1 al 10, siendo el 1 negro y el 10 rubio claro. Al juzgar el nivel del color de tu cabello, tu colorista es capaz de elegir la tintura que te quedará mejor y que te dará los mejores resultados, y también sabe si debes decolorar el cabello antes de lograr el look que deseas.
Otro término de coloración importante es el “tono”, que marca la calidez o la frialdad del color del cabello. El rojo, el anaranjado y el amarillo son tonos cálidos, mientras que el azul, el verde y el violeta son fríos. Y, sin importar lo increíble que esto pueda parecer, todos estos tonos pueden estar presentes en los colores del cabello. Al evaluar correctamente el tono natural de tu color de cabello, tu colorista puede evitar resultados no deseados a la hora de la coloración. Evidentemente, nadie quiere experimentar lo que vivieron algunas “amigas” que trataron de teñirse y terminaron con una cabezota verde.
La “intensidad” es igual de importante para tener en cuenta a la hora de teñirte el cabello. La intensidad es la fuerza de una tintura. “Rubio o rojo veneciano” y “rojo bombero” son los dos tonos de rojizo, pero te puedo garantizar que ninguna persona los confundiría, dado que la diferencia de intensidad es enorme.
Finalmente, si estás buscando un color para tu pelo, debes tener en cuenta el color de base. Hoy en día, las fórmulas de coloraciones indican claramente en el envase sobre qué base deben aplicarse. Generalmente, son las siguientes: rojo, rojo-anaranjado, naranja, oro, neutro, azul, azul-violáceo y violeta. El neutro, azul, azul-violáceo y violeta generalmente están disponibles en color negro, ceniza y rubio platino.
Antes de teñirte el cabello, evalúa con atención el color original. Tú y tu colorista pueden lograr resultados sorprendentes al crear un look natural o incluso un look muy original, exclusivamente para ti. Pero lo más importante es prestar atención para evitar los errores más inoportunos en el proceso de coloración. Una vez que conozcas lo esencial de tu color de cabello, podrás divertirte con las coloraciones.
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